“El Hospital nos mató nuestro bebé”

La tramitología administrativa del Hospital María Inmaculada hizo que un bebé naciera muerto, según denunciaron sus padres en la ciudad de Florencia. Se espera el dictamen de Medicina Legal para instaurar la denuncia penal contra las directivas del centro médico.

John Fredy Nagles Soto

Corporación Juraco

Florencia – Caquetá

Era un feliz 24 de diciembre. Una víspera de Navidad en la que no sólo el Niño Dios nacía, sino el bebé de la familia conformada por Fabián González Gaviria y Damaris Priscila Vargas. La cita para el parto estaba programada para las 7 de la mañana de ese día. Según Fabián, ellos llegaron faltando 10 minutos. Sin embargo, un papel en el que el anestesiólogo valoraba a la joven madre de 22 años hizo que se demorara el procedimiento quirúrgico. Dos horas después el bebé no tenía signos vitales.

El angelito murió por dos procedimientos que podrían catalogarse como negligencia médica.

Según González, padre del bebe fallecido, “nosotros teníamos la cesaria programada para las 7 de la mañana. Cuando llegamos, la secretaria que nos atendió dijo que nos faltaba la valoración del anestesiólogo. Pero el ginecólogo René José Tette Farias nos dijo que los papeles ya estaban en regla, que no necesitábamos nada más sino que ella llegara al quirófano y que de una se hacía el parto”. Sin embargo, en ese trámite, la madre tuvo que padecer sus 2 más largas horas de espera.

Esta es la Acta de Defunción del bebito que falleció por "torpesa médica", subrayaron sus padres.

“Vaya y tome caldito”

Luego de las 9 de la mañana, y de sortear el papeleo administrativo, la subieron a la salsa de partos. Una enfermera que estaba asistiendo a Damaris le dijo que el bebé se le estaba moviendo. “Vaya tome caldito que el bebito se le está moviendo mucho. Más de 2 horas para que a mi esposa la metieran al quirófano para hacerle el monitoreo. Pero la misma enfermera nos dijo que el bebé ya no tenía signos vitales”, denunció González Gaviria.

El sepelio se llevó a cabo en el cementerio central de la capital caqueteña el pasado 26 de diciembre.

Después de que los médicos y enfermeros monitorearon los signos vitales del bebé, éstos le aplicaron, según testimonio de Fabián, una inyección que el lenguaje médico se le conoce como Tramadol. “Esta inyección se la aplicaron a mi esposa para que se le agilizara los dolores y le provocara el parto. Pero me he asesorado y me dicen que esa inyección no era necesaria”, explicó el padre. Tanto la inyección inadecuada como la demora en el parto provocaron la muerte de su bebé, denunciaron.